Me fui del taller para volver a la noche y coger, además de mi amante del pasado, con su mujer, que había visto en una foto. Me volví al hotel y me di un baño previo a una siesta. Disfruté, como siempre, de una ducha y una inmersión en la bañera. Disfruté de mi desnudez, acariciandome, masturbandome, jugueteando con mi pija, mis huevos, mi ano, todo...
Llegó la hora y volví al taller... entré con sigilo, que nadie me viera. No sabía bien por qué pero tenía una intuición.
Ahi vi como el rubio se estaba cogiendo una mina de 20 años (mas o menos) hermosa. Ella estaba apoyada sobre un auto y el desde atrás. Me resistí a masturbarme, pero tenía la pija al rojo, terrible.
Cuando el tipo comenzó a jadear mas fuerte, la muy puta se dio cuenta que estaba por acabar, así que se dio vuelta y lo empezó a pajear. Toda la leche le cayó sobre los pelos de la concha... fue terrible. Luego ella le chupó la pija y se la dejó limpia. Bien puta la guacha... Esperé a que se vista y se fuera. Ahi entré yo...
-Hijo de puta, que caramelito que te comés...
-Uhh, la viste? es una vecina que me paga el auto así... uh, quede transpirado, me pego una ducha y vuelvo
En eso llega la mujer. La foto no mentía. Era apenas un poco mayor que yo, mediana, morocha y unas tetas de buen tamaño. Me vino a saludar y me dijo:
-¿vos sos el de la cita especial?
-Creería que sí
-Bueno..
A continuación me comió la boca y su mano fue a mi pija. Solo la tocó y vio que estaba durísima...
-Uy, como estás! Pero vas a tener que esperar a la cena
-¿Cena?
Efectivamente, había una cena de por medio, vi la mesa y los platos, el mantel...
Vino el rubio y me invitó a sentarme.
-Eso sí- me dijo - desnudate por completo
Eso hice y desde atrás la mujer del rubio me abrazó apoyándome esas hermosas tetas. Seguido a eso, se sube a la mesa, ella también completamente desnuda, y se subió a la mesa, sentándose en e l plato dejando un poco de lugar. Y dijo
-A comerrrrrr
Me subí a la mesa y empecé a comerle la concha, exquisita. No pasó un minuto que por detrás el rubio me empezó a chupar la colita y a pajearme. De vez en cuando me metía un dedo en el ano. Por ahi paró con la paja y lo vi a mi lado, le comí la boca toqué su poronga, tiesa, hermosa. Lo tiré a la mesa y le di una chupada de verga memorable. La jermu estaba a mil y le dio de comer al marido esa cajeta en llamas. Yo no daba más y ahi pasé de saborear ese tronco a cojerme a ese hombre... Me lo garchaba terriblemente. Lo di vuelta y me quedó una vista preciosa: Ese ojete comiendose mi pija y la putona mas allá pajeandose... con una bagette!!!
Acabé en los huevos del rubio y la mujer se bajó para lamer la leche y chuparme la pija que aun seguia dura.
El rubio me llevó a la mesa y me dijo
-Vamos a cojernos a esta loca
Me empezó a besar y a masturbarme nuevamente. A los pocos minutos yo ya estaba a full y penetrando el ojete de esa mina que ya estaba recibiendo por la concha. Las tres bocas iban y venian como locas.
Me salí de ahi y abrí las piernas y con las manos ofrecí mi cola a la pija del rubio y mi boca a la concha de la jermu, con la que hice un 69 que terminó de una manera explosiva:
-Querés champagne? me preguntó la muy puta
Al decir que si, me meó en la boca la zorra y me lo tome todo. Luego se limpió la concha en mi cara, me la refregaba una y otra vez. A lo que el rubio me dijo
-No te vas a ir sin el postre!!!
Y fui a recibir su lechita en mi boca, deliciosa. Le apreté los huevos y subí para besarnos una vez más...
Luego nos duchamos los tres y fui a una segunda vuelta con ella, con otro polvo riquísimo...
A la madrugada me fui, lleno de sexo. Prometí volver.
5 comentarios - 25 años después, parte 2 (relato)