Espero les guste, el relato esta hecho por mi, y es una de mis fantasías sexuales favoritas.
Ayer, me tuve que quedar en la casa de un amigo, pues sus padres salieron de viaje, cabe decir que mi amigo es mayor a mi por lo que el es más fuerte que yo, ese día, mi amigo y yo jugamos vídeo juegos, bebimos soda y vimos películas, hasta el casi la una de la mañana, hora en la que decidimos dormir, pero esa noche jamás la olvidare.
Luego de preparar las camas, ya acomodados, y apunto de dormir, mi amigo se despertó a mitad de la noche, apegándose al filo de la cama me observo y exclamo -deberíamos dormir en la misma cama hoy hace mucho frío-, no pude creer esas palabras, pero decidí ignorarlo, grave error.
Pasó el tiempo y pronto llegaron las tres de la mañana, mi amigo se levanto de la cama lentamente sin hacer ruido, no le vi nada de malo, pues pensé que el solo quería respetar mi sueño, escuche como se abría la puerta lentamente, poco después unos pasos que salían de la habitación casi corriendo, y luego entraban lentamente, antes de darme cuenta, mi amigo ya estaba sobre mi, su mano derecha tapaba mi boca, y su mano izquierda sostenía unas esposas, me esposo a la cama de brazos y piernas, me quito los pantalones y me arranco la camisa de dormir.
Con una sonrisa en la cara, y una voz extraña exclamo -Debiste aceptar la primera oferta- supe que mi suerte cambio, me quito a ropa interior lo más que pudo, saco su enorme pene de su pijama y me lo acerco, aun flácido a la cara, dijo casi con un grito -Chupalo- me rehusé, pero al final el dolor de una aguja y la amenaza de un cuchillo en mi cuello me obligaron a meter su flácido y enorme miembro en mi boca.
De un momento a otro su pene se endureció, tapando mis vías respiratorias, por lo que saque su pene de mi boca al instante, el respondió, -Veo que no te gusta el sabor, y tampoco puedes con su tamaño por la boca veamos como lo hacer por el culo-, suplique, y use todas mis fuerzas para intentar zafarme al punto de lastimarme las muñecas, pero todo fue inútil, levanto mis piernas y tomo su enorme miembro, busco mi ano entre mis glúteos, y sin bacilar, metió apenas la punta, el dolor fue enorme, casi grite del dolor, pero el no se daba por vencido, y exclamo -Eres una puta de culo apretado, espero que te duela-, insistió hasta que todo su miembro entro en mi ano, la sangre brotaba y el dolor era casi insoportable.
Comenzó a moverse dentro mío, el dolor me corrompía, sin embargo algo en mi los disfrutaba, me sentí enfermo en ese momento, pero el seguía, sin detenerse un segundo, como esperando que el climax llegara pronto, derrepente el dijo en voz burlona -mirate pequeña puta, se te acaba de parar- mire hacia abajo, era verdad, en verdad lo estaba disfrutando, el me empezó a masturbar con furia, hasta que eyacule con tal fuerza que moje mi cara con espera, en ese momento el saco su pene dentro mío dijo -toma esto, es tuyo, pequeña zorra- apunto a mi cara con su miembro y me termino en la cara, yo estaba agotado pero el seguía con su erección al máximo, saco de su armario un uniforme de colegiala y una peluca rubia, supe entonces que este no era el final de aquella noche tan larga.
Bueno espero que hayan disfrutado de este relato tan corto, si me pueden dar consejos para mejorar, les estaré muy agradecidos, buenas noches.
Ayer, me tuve que quedar en la casa de un amigo, pues sus padres salieron de viaje, cabe decir que mi amigo es mayor a mi por lo que el es más fuerte que yo, ese día, mi amigo y yo jugamos vídeo juegos, bebimos soda y vimos películas, hasta el casi la una de la mañana, hora en la que decidimos dormir, pero esa noche jamás la olvidare.
Luego de preparar las camas, ya acomodados, y apunto de dormir, mi amigo se despertó a mitad de la noche, apegándose al filo de la cama me observo y exclamo -deberíamos dormir en la misma cama hoy hace mucho frío-, no pude creer esas palabras, pero decidí ignorarlo, grave error.
Pasó el tiempo y pronto llegaron las tres de la mañana, mi amigo se levanto de la cama lentamente sin hacer ruido, no le vi nada de malo, pues pensé que el solo quería respetar mi sueño, escuche como se abría la puerta lentamente, poco después unos pasos que salían de la habitación casi corriendo, y luego entraban lentamente, antes de darme cuenta, mi amigo ya estaba sobre mi, su mano derecha tapaba mi boca, y su mano izquierda sostenía unas esposas, me esposo a la cama de brazos y piernas, me quito los pantalones y me arranco la camisa de dormir.
Con una sonrisa en la cara, y una voz extraña exclamo -Debiste aceptar la primera oferta- supe que mi suerte cambio, me quito a ropa interior lo más que pudo, saco su enorme pene de su pijama y me lo acerco, aun flácido a la cara, dijo casi con un grito -Chupalo- me rehusé, pero al final el dolor de una aguja y la amenaza de un cuchillo en mi cuello me obligaron a meter su flácido y enorme miembro en mi boca.
De un momento a otro su pene se endureció, tapando mis vías respiratorias, por lo que saque su pene de mi boca al instante, el respondió, -Veo que no te gusta el sabor, y tampoco puedes con su tamaño por la boca veamos como lo hacer por el culo-, suplique, y use todas mis fuerzas para intentar zafarme al punto de lastimarme las muñecas, pero todo fue inútil, levanto mis piernas y tomo su enorme miembro, busco mi ano entre mis glúteos, y sin bacilar, metió apenas la punta, el dolor fue enorme, casi grite del dolor, pero el no se daba por vencido, y exclamo -Eres una puta de culo apretado, espero que te duela-, insistió hasta que todo su miembro entro en mi ano, la sangre brotaba y el dolor era casi insoportable.
Comenzó a moverse dentro mío, el dolor me corrompía, sin embargo algo en mi los disfrutaba, me sentí enfermo en ese momento, pero el seguía, sin detenerse un segundo, como esperando que el climax llegara pronto, derrepente el dijo en voz burlona -mirate pequeña puta, se te acaba de parar- mire hacia abajo, era verdad, en verdad lo estaba disfrutando, el me empezó a masturbar con furia, hasta que eyacule con tal fuerza que moje mi cara con espera, en ese momento el saco su pene dentro mío dijo -toma esto, es tuyo, pequeña zorra- apunto a mi cara con su miembro y me termino en la cara, yo estaba agotado pero el seguía con su erección al máximo, saco de su armario un uniforme de colegiala y una peluca rubia, supe entonces que este no era el final de aquella noche tan larga.
Bueno espero que hayan disfrutado de este relato tan corto, si me pueden dar consejos para mejorar, les estaré muy agradecidos, buenas noches.
1 comentarios - Relato y fantasía la violación