Esto que les voy a contar ocurrió hace algunos años, un verano muy hot. Yo estaba estudiando en Capital pero todos los veranos, más o menos al 15 de Diciembre, volvía a la casa de mis viejos a pasar el verano. Era mi primer año en la Uni y venía medio flojo. De castigo, aunque para mí era un alivio, mis viejos se habían casi un mes a la costa con unos amigos y yo me quedaba a cuidar la casa y a estudiar. Mis viejos vivían en un barrio parque, con un jardín en el frente de la casa y una pileta atrás. El encargo era “estudiar, regar las plantas y mantener limpia la pileta”. Si hay algo que odio era limpiar las hojas de la pileta y mis viejos me tenían podrido con eso. Para colmo, yo solo había metido 2 materias, así que mi viejo le había pedido a su socio que se diera una vueltita para ver que hacía. El socio de mi viejo, Gustavo, tenía en ese momento cerca de 45 años, vivía también en el mismo barrio (a un par de cuadras) y nos llevábamos muy bien. Aparte todos los años pasamos las fiestas juntos así que tenía confianza. Es un hombre de familia pero que se conversa muy bien, mide un poco más que yo, tiene un cuerpo normal pero muy varonil y en esa época se cuidaba bastante yendo al gym frecuentemente.
El me cargaba porque yo era más flacucho, siempre me decía que me cagaba de hambre guardando la plata que me enviaba mi viejo para salir de joda, y yo se lo negaba. Enfin, antes de irse mi viejo me dejaron algo de plata, me repitieron de nuevos todas las instrucciones y me dijeron que Gustavo pasaría para ver “si necesitaba algo” o sea, a controlar que no incendiara la casa.
Pasaron un par de días y estuvo todo tranquilo. Yo tenía más o menos todo ordenado pero tenía que limpiar la pileta, también lo quería hacer para usarla pero me daba fiaca. El viernes a la tarde estaba tirado en el living mirando tele cuando veo que estacionaba afuera Gustavo. Lo vi bajando del auto, venía con un short y se le veían muy lindas las piernas. Nunca me había detenido a mirarlo así pero cuando se acercaba le vi el bulto, no parecía grande pero si muy sexy, y el torso parecía más grande.
“Veo que todavía no hiciste explotar la casa tomy… jajaja” me dijo y entro. “posta no vendrás de vigilante no?” le pregunte y me contesto “naaa, a tu edad yo ya hubiera hecho un lindo quilombo en esta semejante casa. Lo único que te pido, sabiendo cómo es tu viejo, no rompas mucho…”. La verdad que siempre había sido un tipo piola y no esperaba que fuera un buchón. Paso a la cocina, abrió la heladera y saco una cerveza de mi viejo. Se sentó en el living y nos pusimos a charlar. Yo había borrado mis recuerdos de momentos familiares y de repente me sentía muy atraído a este hombre que ni parecía apreciar mi excitación. Me dijo “tenes planes para hoy? Alguna visita?” con mirada picara, yo le conteste: “naaa, viste que yo vengo poco acá y ahora están casi todos de vacaciones. Tengo un par de amigos acá pero son peligrosos para la casa jajaja”. Había evadido la pregunta y él me creyó. Pego una mirada por la casa y comprobó que tenía todo ordenado, y cuando vio para el patio de atrás se dio cuenta que no había tocado la pileta. “che, tu viejo me encargo que me asegure que limpies la pileta, no te voy a joder pero podrías aprovechar para usarla, está re buena!” y yo le dije: “no tengo ni ganas pero es cierto, los días están ideales para pileta. Voy a tratar de hacerlo mañana.” y me contestó: “mañana te llamo antes, por si estás complicado, y te vengo a dar una mano, en un toque la dejamos impecable”. Le dije que me parecía bien, se terminó la cerveza, me dio un beso y se fue. Yo había quedado re caliente, el tipo no era un modelo ni mucho menos y lo conocía de mucho tiempo atrás pero esta vez lo miraba de otra forma. Habrá sido que estaba escaso de sexo y que hacía poco tiempo había estado por primera vez con otro hombre, pero Gustavo me despertaba cosas nuevas. Tuve que descargarme solo, tranquilo en casa.
Al final el viernes me quede mirando una peli, me comí una pizza de esas congeladas y me fui a dormir. El sábado me levante cerca del mediodía, me puse a preparar algo para comer y vi que tenía un mensaje. Era Gustavo que me decía que tipo 5 pasaba por casa y me daba una mano con la pileta, al toque le conteste que lo esperaba entonces, tenía ganas de verlo. La tarde me la pase boludeando, tipo 4 me pego un baño y me prepare para que llegara Gustavo. Para eso me puse un slip diminuto que tenía y me quede así en casa.
Yo sabía que él era muy puntual, obsesivamente, así que tipo 4:55 arranque a acomodar las cosas de la pileta. Antes le deje un cartelito en la puerta: “Gustavo, pasa está abierto, estoy en la pileta”. Me había agachado a sacar las hojitas del borde cuando escuche que abría la puerta del patio. Estaba con short y musculosa, para comérselo. Me levante y le dije: “Gusss, cómo va? Perdona que estoy así pero no me traje maya este año…”, él estaba medio sonrojado y no me quería mirar mucho el slip, me contestó: “todo bien, hay que ponerse cómodo para laburar, aparte yo te he visto en bolas cuando recién naciste” y le conteste: “es cierto, pero algo he crecido jajaja”, él se rio un tanto nervioso y se puso a sacar hojas conmigo. Hacia tanto calor que se tuvo que sacar la musculosa, que cagada jajaja. No tenía un cuerpo de modelo pero el aspecto de macho era mucho mejor, más excitante. Yo estaba terminando de sacar unas hojas en una esquina, me tuve inclinar dentro de la pileta...
y cuando me reincorpore me di cuenta que Gustavo me estaba mirando el culito y se le había parado. Se hizo el boludo, se quedó sentado al lado de la pileta pero yo sabía que le había picado el bichito...
Terminamos de limpiarla y le dije: “bue… listo el pollo, hay que probar el agua”, y así me zambullí de una. Volví a mirarlo y estaba parado afuera sin hacer nada entonces le pregunte: “y? no te metes? El agua esta re buena”, él me contestó: “pasa que no me traja maya…” y yo lo invite: “dale, sacate la bermuda y metete, tanto laburo al pedo?”. Se puso colorado pero igual se sacó la bermuda. Creo que en ese momento se dio cuenta como lo miraba yo, me enfoque a su bulto sin ningún remordimiento. Como si lo hubiera hecho poner más nervioso, se zambullo enseguida. Se dio un par de giros y quedamos a unos metros al borde de la pileta. “la verdad que está re buena el agua, valió la pena” dijo y yo le tire un palito “no solo el agua está buena… el día ayuda… no?” él asintió y se salió con un salto. Se secó un poco y se puso la bermuda. Yo también salí, ahora mi slip mojado hacia que se me vea todo, yo me las ingenia para darme una vuelta y él me volvió a mirar disimuladamente.
Lo mire y se hizo el distraído y me dijo: “bue… Tomy te dejo tranquilo” y yo le contesté: “a mí no me jodes, todo bien Gus, al contrario, estaba muy aburrido solito…”, él se sonrió pero se metió a la casa de nuevo. Me dijo que cualquier cosa lo llamara pero me dio a entender que no iba a pasar por unos días, nos saludamos fríamente y se fue. Él no era así y yo pensé que de verdad le había gustado algo de mí como para que se pudiera tan nervioso. Tenía ganas de avanzarlo más pero no me pareció copado de mi parte así que me quede en el molde.
El resto del día transcurrió muy tranquilo, me puse a estudiar un poco, me pedí unas empanadas y me tire a mirar la tele, bastante embolado. Sin darme cuenta, me quede dormido en el sillón y obviamente soñé con Gustavo… Me desperté un poco más temprano que el día anterior y enseguida vi que tenía otro mensaje. Era Gustavo de nuevo… me avisaba que su mujer se había ido a cenar con su suegra y como yo le había dicho que estaba embolado me decía de pasar al mediodía a comer conmigo. Le contesté al toque que sí, que no se olvidara de la maya… Yo me pegue un baño, me perfume y lo puse un shortcito para esperarlo.
Eran cerca de las 12 cuando lo vi estacionar, venía con unas bolsas de rotisería y traía la maya puesta. “ah, cocinamos entonces jajaja” le dije y entro. Le conté que no había hecho casi nada, que me había embolado y él se apeno. Nos pusimos a comer la pasta que había traído, yo lave los platos y él se tomó una cerveza. Nos fuimos al living a ver un rato un partido de futbol. Paso un rato en que casi ni hablamos, solo miramos la tele. Yo tome la iniciativa y le dije: “vamos a la pile?” y él me dijo “dale, hoy traje maya”. Yo salí al patio, me saque el short y me quede con otro slip blanco. Lo vi cómo me miraba desde adentro mientras se sacaba la remera. Cuando salió atrás de mí no pudo ocultar la erección que le provocaba verme, eso me puso como loco.
Enseguida se tiró al agua tratando de que yo no lo notara y yo lo seguí. “ufff que fría que está hoy no?” me dijo y yo conteste: “si mejor salimos no?” y salí de un salto de la pileta. Inevitablemente sabía que yo iba a poder ver erecto cuando saliera y así fue, entonces le dije: “más que fría, parece caliente… mira cómo estás Gus…” señalándole el bulto. “ja, no me había dado cuenta…” le dijo y yo le contesté: “yo si me di cuenta y tengo una duda…”. Él se quedó pasmado, atónito, no sabía que decir. Yo seguí: “creo que te diste cuenta que he crecido y que no soy un bebe y que me gustas…”. Se puso mucho más nervioso y balbuceó: “tomas, para! Nada que ver, y como decís eso?” “Si, Gustavo, me re calentas, ya sé que está mal pero es lo que me pasa…” le conteste. Se puso la remera, las ojotas y siguió diciendo que no estaba bien. Llego hasta la puerta y antes de irse me dijo: “Tomy, perdona pero no está bien. Tu viejo no solo es mi socio sino mi amigo.” y se fue.
Yo sabía que no era sencillo y que no lo iba a reconocer pero por lo menos me había sacado la duda. La situación me había puesto un poco nervioso pero también me había excitado. Pensé que sería bueno hacer algo para distraerme. La verdad que me rindió mucho la tarde para hacer unos ejercicios de la facultad. Sin darme cuenta se hicieron las 6 de la tarde. El calor era intenso y me dio ganas de pegarme un chapuzón cuando vi que tenía un nuevo mensaje. De nuevo era él, me decía que lo sentía y que no quería quedar mal conmigo, yo le conteste que estaba todo bien, solo que estaba aburrido y pensé que podíamos divertirnos un poco… como para sacarle dramatismo a la situación. Tardo un rato en contestar y me dijo: “si es para que no te aburras tanto, podría pasar…”, yo entendí que él solo no se podía hacer cargo entonces le seguí la corriente: “dale, hacelo por mí que estoy re embolado, venite que te espero en la pile, el agua ahora está calentita…”. Con un ok suyo supe que la tarde iba a ser más “divertida…”.
Le deje un cartelito en la puerta nuevamente, “entra, estoy en la pile”. Me saque la remera, el short y el slip y me metí en bolas a la pile.
No pasaron más de 5 minutos y escuche su auto. Entro y se vino para el patio. “uy que bueno que viniste, estaba re embolado” le dije mirándolo desde la pileta contra el borde. Me sonrió y me contesto: “yo también estaba aburrido en casa”, se sacó la remera, las ojotas y se metió. Después de hundir la cabeza dentro del agua se dio cuenta que yo estaba desnudo y me dijo: “veo que estás fresquito no?” y le conteste: “si, tendrías que probar vos…” se sumergió y reboleo la maya afuera de la pile. Yo también me metí bajo el agua y aunque borrosa, pude comprobar que de nuevo estaba re cargado y que tenía la verga parada.
Cuando salí a la superficie el me avanzo y se puso frente a mí, a centímetros, su verga rozo la mía que también empezaba a endurecer, y me preguntó: “estaba aburrido?” y yo contesté: “pero ya no…” y me sumergí. Llegue hasta sus rodillas y le di unos toques con mis labios en su verga que estaba rígida como una piedra, se la sujete y me la afirme dentro de la boca dejando salir casi todo el aire que había tomado. Su verga debutaba con otro hombre y con boca se descargaba las ganas de chuparlo. Alcance a meterla casi toda dentro de mi boca 4 o 5 veces antes de tener que volver a salir a la superficie. Gustavo estaba prendido fuego, se había apoyado contra la pileta y recibía con mucho placer mis lengüetazos. Me volví a meter y pude succionar su pedazo unas 10 veces antes de quedarme sin aire. Gustavo se dio cuenta de lo que me estaba gustando pero quería más entonces me dijo: “que divertido esto, imagínate en el living” y me tomo de la mano y entramos los dos. Se sentó en una silla, me miro y me dijo: "estoy tan caliente que no aguanto más, me ayudas?"
Me arrodille frente a él y volví a mi tarea. Succionaba suavemente su verga, que me entraba solo la mitad mientras él gozaba como un loco. Era tanta la saliva que le derramaba que me rebalsaba de la boca. Gustavo empezó a moverse de una manera frenética, me daba pequeños golpecitos con su verga en mi paladar y me quiso alejar como indicando que estaba por terminar. Yo no quería soltarlo y me resistí. De repente sentí que la saliva se mezclaba con algo más espeso y que unos segundos más me llenaba la boca. Dejo salir un grito de placer y yo le succione todo lo que me regalaba. Lo deje limpito.
Me pare y le dije que le iba a traer una cerveza, me giró, me beso la cola y se fue a sentarse en un sillón. FIN.
El me cargaba porque yo era más flacucho, siempre me decía que me cagaba de hambre guardando la plata que me enviaba mi viejo para salir de joda, y yo se lo negaba. Enfin, antes de irse mi viejo me dejaron algo de plata, me repitieron de nuevos todas las instrucciones y me dijeron que Gustavo pasaría para ver “si necesitaba algo” o sea, a controlar que no incendiara la casa.
Pasaron un par de días y estuvo todo tranquilo. Yo tenía más o menos todo ordenado pero tenía que limpiar la pileta, también lo quería hacer para usarla pero me daba fiaca. El viernes a la tarde estaba tirado en el living mirando tele cuando veo que estacionaba afuera Gustavo. Lo vi bajando del auto, venía con un short y se le veían muy lindas las piernas. Nunca me había detenido a mirarlo así pero cuando se acercaba le vi el bulto, no parecía grande pero si muy sexy, y el torso parecía más grande.
“Veo que todavía no hiciste explotar la casa tomy… jajaja” me dijo y entro. “posta no vendrás de vigilante no?” le pregunte y me contesto “naaa, a tu edad yo ya hubiera hecho un lindo quilombo en esta semejante casa. Lo único que te pido, sabiendo cómo es tu viejo, no rompas mucho…”. La verdad que siempre había sido un tipo piola y no esperaba que fuera un buchón. Paso a la cocina, abrió la heladera y saco una cerveza de mi viejo. Se sentó en el living y nos pusimos a charlar. Yo había borrado mis recuerdos de momentos familiares y de repente me sentía muy atraído a este hombre que ni parecía apreciar mi excitación. Me dijo “tenes planes para hoy? Alguna visita?” con mirada picara, yo le conteste: “naaa, viste que yo vengo poco acá y ahora están casi todos de vacaciones. Tengo un par de amigos acá pero son peligrosos para la casa jajaja”. Había evadido la pregunta y él me creyó. Pego una mirada por la casa y comprobó que tenía todo ordenado, y cuando vio para el patio de atrás se dio cuenta que no había tocado la pileta. “che, tu viejo me encargo que me asegure que limpies la pileta, no te voy a joder pero podrías aprovechar para usarla, está re buena!” y yo le dije: “no tengo ni ganas pero es cierto, los días están ideales para pileta. Voy a tratar de hacerlo mañana.” y me contestó: “mañana te llamo antes, por si estás complicado, y te vengo a dar una mano, en un toque la dejamos impecable”. Le dije que me parecía bien, se terminó la cerveza, me dio un beso y se fue. Yo había quedado re caliente, el tipo no era un modelo ni mucho menos y lo conocía de mucho tiempo atrás pero esta vez lo miraba de otra forma. Habrá sido que estaba escaso de sexo y que hacía poco tiempo había estado por primera vez con otro hombre, pero Gustavo me despertaba cosas nuevas. Tuve que descargarme solo, tranquilo en casa.
Al final el viernes me quede mirando una peli, me comí una pizza de esas congeladas y me fui a dormir. El sábado me levante cerca del mediodía, me puse a preparar algo para comer y vi que tenía un mensaje. Era Gustavo que me decía que tipo 5 pasaba por casa y me daba una mano con la pileta, al toque le conteste que lo esperaba entonces, tenía ganas de verlo. La tarde me la pase boludeando, tipo 4 me pego un baño y me prepare para que llegara Gustavo. Para eso me puse un slip diminuto que tenía y me quede así en casa.
Yo sabía que él era muy puntual, obsesivamente, así que tipo 4:55 arranque a acomodar las cosas de la pileta. Antes le deje un cartelito en la puerta: “Gustavo, pasa está abierto, estoy en la pileta”. Me había agachado a sacar las hojitas del borde cuando escuche que abría la puerta del patio. Estaba con short y musculosa, para comérselo. Me levante y le dije: “Gusss, cómo va? Perdona que estoy así pero no me traje maya este año…”, él estaba medio sonrojado y no me quería mirar mucho el slip, me contestó: “todo bien, hay que ponerse cómodo para laburar, aparte yo te he visto en bolas cuando recién naciste” y le conteste: “es cierto, pero algo he crecido jajaja”, él se rio un tanto nervioso y se puso a sacar hojas conmigo. Hacia tanto calor que se tuvo que sacar la musculosa, que cagada jajaja. No tenía un cuerpo de modelo pero el aspecto de macho era mucho mejor, más excitante. Yo estaba terminando de sacar unas hojas en una esquina, me tuve inclinar dentro de la pileta...
y cuando me reincorpore me di cuenta que Gustavo me estaba mirando el culito y se le había parado. Se hizo el boludo, se quedó sentado al lado de la pileta pero yo sabía que le había picado el bichito...
Terminamos de limpiarla y le dije: “bue… listo el pollo, hay que probar el agua”, y así me zambullí de una. Volví a mirarlo y estaba parado afuera sin hacer nada entonces le pregunte: “y? no te metes? El agua esta re buena”, él me contestó: “pasa que no me traja maya…” y yo lo invite: “dale, sacate la bermuda y metete, tanto laburo al pedo?”. Se puso colorado pero igual se sacó la bermuda. Creo que en ese momento se dio cuenta como lo miraba yo, me enfoque a su bulto sin ningún remordimiento. Como si lo hubiera hecho poner más nervioso, se zambullo enseguida. Se dio un par de giros y quedamos a unos metros al borde de la pileta. “la verdad que está re buena el agua, valió la pena” dijo y yo le tire un palito “no solo el agua está buena… el día ayuda… no?” él asintió y se salió con un salto. Se secó un poco y se puso la bermuda. Yo también salí, ahora mi slip mojado hacia que se me vea todo, yo me las ingenia para darme una vuelta y él me volvió a mirar disimuladamente.
Lo mire y se hizo el distraído y me dijo: “bue… Tomy te dejo tranquilo” y yo le contesté: “a mí no me jodes, todo bien Gus, al contrario, estaba muy aburrido solito…”, él se sonrió pero se metió a la casa de nuevo. Me dijo que cualquier cosa lo llamara pero me dio a entender que no iba a pasar por unos días, nos saludamos fríamente y se fue. Él no era así y yo pensé que de verdad le había gustado algo de mí como para que se pudiera tan nervioso. Tenía ganas de avanzarlo más pero no me pareció copado de mi parte así que me quede en el molde.
El resto del día transcurrió muy tranquilo, me puse a estudiar un poco, me pedí unas empanadas y me tire a mirar la tele, bastante embolado. Sin darme cuenta, me quede dormido en el sillón y obviamente soñé con Gustavo… Me desperté un poco más temprano que el día anterior y enseguida vi que tenía otro mensaje. Era Gustavo de nuevo… me avisaba que su mujer se había ido a cenar con su suegra y como yo le había dicho que estaba embolado me decía de pasar al mediodía a comer conmigo. Le contesté al toque que sí, que no se olvidara de la maya… Yo me pegue un baño, me perfume y lo puse un shortcito para esperarlo.
Eran cerca de las 12 cuando lo vi estacionar, venía con unas bolsas de rotisería y traía la maya puesta. “ah, cocinamos entonces jajaja” le dije y entro. Le conté que no había hecho casi nada, que me había embolado y él se apeno. Nos pusimos a comer la pasta que había traído, yo lave los platos y él se tomó una cerveza. Nos fuimos al living a ver un rato un partido de futbol. Paso un rato en que casi ni hablamos, solo miramos la tele. Yo tome la iniciativa y le dije: “vamos a la pile?” y él me dijo “dale, hoy traje maya”. Yo salí al patio, me saque el short y me quede con otro slip blanco. Lo vi cómo me miraba desde adentro mientras se sacaba la remera. Cuando salió atrás de mí no pudo ocultar la erección que le provocaba verme, eso me puso como loco.
Enseguida se tiró al agua tratando de que yo no lo notara y yo lo seguí. “ufff que fría que está hoy no?” me dijo y yo conteste: “si mejor salimos no?” y salí de un salto de la pileta. Inevitablemente sabía que yo iba a poder ver erecto cuando saliera y así fue, entonces le dije: “más que fría, parece caliente… mira cómo estás Gus…” señalándole el bulto. “ja, no me había dado cuenta…” le dijo y yo le contesté: “yo si me di cuenta y tengo una duda…”. Él se quedó pasmado, atónito, no sabía que decir. Yo seguí: “creo que te diste cuenta que he crecido y que no soy un bebe y que me gustas…”. Se puso mucho más nervioso y balbuceó: “tomas, para! Nada que ver, y como decís eso?” “Si, Gustavo, me re calentas, ya sé que está mal pero es lo que me pasa…” le conteste. Se puso la remera, las ojotas y siguió diciendo que no estaba bien. Llego hasta la puerta y antes de irse me dijo: “Tomy, perdona pero no está bien. Tu viejo no solo es mi socio sino mi amigo.” y se fue.
Yo sabía que no era sencillo y que no lo iba a reconocer pero por lo menos me había sacado la duda. La situación me había puesto un poco nervioso pero también me había excitado. Pensé que sería bueno hacer algo para distraerme. La verdad que me rindió mucho la tarde para hacer unos ejercicios de la facultad. Sin darme cuenta se hicieron las 6 de la tarde. El calor era intenso y me dio ganas de pegarme un chapuzón cuando vi que tenía un nuevo mensaje. De nuevo era él, me decía que lo sentía y que no quería quedar mal conmigo, yo le conteste que estaba todo bien, solo que estaba aburrido y pensé que podíamos divertirnos un poco… como para sacarle dramatismo a la situación. Tardo un rato en contestar y me dijo: “si es para que no te aburras tanto, podría pasar…”, yo entendí que él solo no se podía hacer cargo entonces le seguí la corriente: “dale, hacelo por mí que estoy re embolado, venite que te espero en la pile, el agua ahora está calentita…”. Con un ok suyo supe que la tarde iba a ser más “divertida…”.
Le deje un cartelito en la puerta nuevamente, “entra, estoy en la pile”. Me saque la remera, el short y el slip y me metí en bolas a la pile.
No pasaron más de 5 minutos y escuche su auto. Entro y se vino para el patio. “uy que bueno que viniste, estaba re embolado” le dije mirándolo desde la pileta contra el borde. Me sonrió y me contesto: “yo también estaba aburrido en casa”, se sacó la remera, las ojotas y se metió. Después de hundir la cabeza dentro del agua se dio cuenta que yo estaba desnudo y me dijo: “veo que estás fresquito no?” y le conteste: “si, tendrías que probar vos…” se sumergió y reboleo la maya afuera de la pile. Yo también me metí bajo el agua y aunque borrosa, pude comprobar que de nuevo estaba re cargado y que tenía la verga parada.
Cuando salí a la superficie el me avanzo y se puso frente a mí, a centímetros, su verga rozo la mía que también empezaba a endurecer, y me preguntó: “estaba aburrido?” y yo contesté: “pero ya no…” y me sumergí. Llegue hasta sus rodillas y le di unos toques con mis labios en su verga que estaba rígida como una piedra, se la sujete y me la afirme dentro de la boca dejando salir casi todo el aire que había tomado. Su verga debutaba con otro hombre y con boca se descargaba las ganas de chuparlo. Alcance a meterla casi toda dentro de mi boca 4 o 5 veces antes de tener que volver a salir a la superficie. Gustavo estaba prendido fuego, se había apoyado contra la pileta y recibía con mucho placer mis lengüetazos. Me volví a meter y pude succionar su pedazo unas 10 veces antes de quedarme sin aire. Gustavo se dio cuenta de lo que me estaba gustando pero quería más entonces me dijo: “que divertido esto, imagínate en el living” y me tomo de la mano y entramos los dos. Se sentó en una silla, me miro y me dijo: "estoy tan caliente que no aguanto más, me ayudas?"
Me arrodille frente a él y volví a mi tarea. Succionaba suavemente su verga, que me entraba solo la mitad mientras él gozaba como un loco. Era tanta la saliva que le derramaba que me rebalsaba de la boca. Gustavo empezó a moverse de una manera frenética, me daba pequeños golpecitos con su verga en mi paladar y me quiso alejar como indicando que estaba por terminar. Yo no quería soltarlo y me resistí. De repente sentí que la saliva se mezclaba con algo más espeso y que unos segundos más me llenaba la boca. Dejo salir un grito de placer y yo le succione todo lo que me regalaba. Lo deje limpito.
Me pare y le dije que le iba a traer una cerveza, me giró, me beso la cola y se fue a sentarse en un sillón. FIN.
5 comentarios - Cuidando la casa de mis padres