Noche de Borrachera - El Final

Hola, como estan? Disculpen si no seguí con los relatos, pero estuve con poco tiempo para sentarme en frente de la PC. Y no quiero dejar de agradecer a todos los que comentaron mis 2 relatos anteriores. Gracias a la aceptación que tuvieron es que sigo relatando.

Luego de aquella noche de lujuria en el telo nos quedamos dormidos. A la mañana me desperté y lo vi a Andy mirando el techo. Lo saludé.

Yo: -Buen día, hace mucho te despertaste?
Andy: -Que hacés che. No, me desperté hace un rato.
Yo: -Ah. Que tal dormiste? Yo estaba tan en pedo que me dormí al toque.
Andy: -Si, yo también.

De esa pequeña conversación pude notar que Andy estaba serio, tenso, incómodo con la situación. De hecho, nos habíamos dormido desnudos, y ahora él tenía puesto el boxer.
Como para romper el hielo le dije que iba a pedir el desayuno. Afirmó con la cabeza.
Entonces me decidí y tiré toda la carne al asador.

Yo: -Che boludo, lo que pasó ayer, tenemos que hablar.
Andy: -Si, pero la verdad es que no se qué carajo decirte.
Yo: -Yo tampoco, es difícil la situación. Ojala estuviéramos en pedo, sería más fácil hablar jajaja.
Andy: (me miró muy serio) -Yo no me rio boludo.
Yo: -Bueno, pará un poco, hablemos, lo hecho ya está hecho. Además, sacando el chupi que teníamos encima, la pasamos bien, y no sólo hoy, la otra vez también.
(Andy me miraba, su mirada denotaba miedo, y a la vez aceptación).
Yo: -Mirá, no te digo que seamos pareja, ni que seamos putos. De hecho, a mi me siguen gustando las minas.
Andy: -Si, a mi también, pero empiezo a pensar en lo que pasó anoche y ...
Yo: -Si, ya se.

Justo en ese momento golpearon la puerta, era el conserje que nos traía el desayuno. Decidimos cambiar de tema para calmarnos un poco. Después de un rato la charla volvió al tema, pero ya más tranquilos pudimos hablar sin miedos y sin tanto prejuicio, hasta que llegamos a una conclusión: seguir siendo amigos (que es lo más importante), seguir con nuestras vidas como siempre, y, cada tanto, aprovechando que la pasamos tan bien juntos, darnos un permitido cada tanto.

Luego de semejante charla, nos dimos un abrazo y fuimos a darnos una ducha rápida antes de salir.

Teniendo las cosas claras, y habiendo afianzado aun más la relación, nos bañamos juntos. Todo iba muy normal, casi terminando el baño, cuando a mi se me cae el jabón. Me agaché para buscarlo y Andy me dijo: -Epa epa, puede ser peligroso. Pero decí que después de lo de anoche, prefiero dejarte la cola tranquila jajajaja.
El hdp se estaba divirtiendo con la situación, y su carcajada me sirvió para relajarme a mi también. Entonces le dije: -Bueno, eso no quita que yo pueda hacerte algo. Y así sin pensarlo, agachado como estaba, me metí la pija en la boca. Ya se, soy más fácil que la tabla del 0. Pero vi su pija ahí, flácida, recién limpita, que la tentación reinó mi cabeza.

Empecé de manera suave, tomando su pija con mi mano derecha, recorriendo toda su extensión con mis labios. Cada tanto, cuando lo tenía dentro, jugaba con mi lengua.

De a poco, su pija iba creciendo dentro de mi boca, y eso me calentaba más todavía. En un momento me dice: -Pará boludo, vamos a la cama, que se me aflojan las piernas y nos vamos a hacer percha.

Fuimos a la cama, así, mojados como estábamos, y nos acostamos. Le di un beso en la boca, a lo que me dijo: -Que boca más linda que tenés. Bajé hasta su pija que seguía durita, y seguí con mi labor.

Seguí recorriendo toda su pija con mis labios, de arriba a abajo y visceversa. Con mi mano derecha subía y bajaba su prepucio en dirección contraria a mi boca. Por los gemidos de Andy me di cuenta de que la estaba pasando bien. Hasta en un momento me dijo "que rico pete que me estás haciendo". Debo reconocer que me dió un poco de vergüenza escuchar eso, pero también me dieron más ganas de seguir.

Yo sentía su pija cada vez más dura, y su secreción preseminal se hacía presente. Sentía su sabor saladito, y no desaprobeché ninguno de sus juguitos previos. En un momento me paró y me dijo: -Fer, te puedo pedir una cosa?. Yo asentí con mi cabeza y me dijo: -Con ninguna mina pude hacer algo, y, si no tenés drama, te puedo acabar en la cara?

Sin pensármelo demasiado le dije que si y nos ubicamos en una posición acorde. Seguí chu-peteándolo y cuando estaba por acabar, se agarró la pija y se hizo tremenda paja hasta que finalmente salió toda su leche de su pija.

Obviamente, fue la primera vez que sentí el semen caliente caer sobre mi cara. Y no sólo era la primera vez, sino que era ajeno! La sensación fue raramente hermosa! Si bien podría haber pensado cualquier cosa en ese momento, la satisfacción que sentí por haberle dado placer a mi amigo no tenía nombre.

Y tengo que reconocerlo, no se por qué, pero al sentir esa lechita caliente impactar sobre mi cara, una sensación recorría mi cuerpo, me sentía algo "putita". Y no sólo me sentía putita, sino que me encantaba.

Después de unos minutos, Andy se recuperó mientras yo me lavaba la cara en el baño. No me pude contener, y con los dedos recogí la leche que quedaba en mi cara y me la tomé. Debo confesar que estaba muuuy rica.

Volví a la cama y Andy estaba raro.

Andy: -Qué hicimos che? Pensé que iba a ser cada tanto.
Yo: -No pasa nada, es como para restarle importancia.
Andy: -Igual, es una locura. Además, mirate vos, lo que te hice.
Yo: -No pasa nada, además vos no me obligaste a nada.

Me miraba y no me creía.

Yo: -Es más, vení (me acerqué), dame un beso.
Andy: -No, salí de acá.
Yo: -Dale, es un beso, así te sacas esa sensación de encima y te relajás.
(lo besé, despacio, casi con ternura).
Andy: -Mirá que sos eh! Pero tenés razón, necesitaba ese beso.

Y nos empezamos a besar con mucha ternura, despacio, sin apuros. Mi pija volvió a crecer, y la misma sensación que antes recorría mi cuerpo.

Yo: -Sabés una cosa? Cuando me acabaste en la cara...
Andy: -Si, decime.
Yo: -Me da cosa.
Andy: -Dale boludo, somos re amigos, no pasa nada.
Yo: (explosivamente me animé) -Me hiciste sentir re puta con esa acabada, y me encantó.
Andy: -Entonces dejate llevar hermosa, que te voy a hacer volar.

Uf, eso me dejo helado, no me lo esperaba. Pero Andy no me dio mucho tiempo para pensar y volvió a besarme. Y con la misma ternura de antes, bajó por mi cuello y por mis hombros, haciendo que mi piel se erizara.

Siguió con los besos y bajó hasta mis tetillas. Me agarró los pechos con ambas manos y me chupó los pezones con mucha delicadeza. Para entonces, yo llegaba hasta la extratósfera de tanto placer. Tanto placer y con tan poco.

Soltó uno de mis pechos, y sin dejar de chupármelos, me empezó a pajear. Qué decir en este momento! El placer seguía en aumento, y cada tanto soltaba mi pija para tocarme los huevos y la raya de la cola.
Luego de un rato de semejante paja y chupada de tetas, no me quedó otra que acabar. Y un aplauso para Andy, que se dio cuenta y bajó para meterse toda mi lechita en su boca.

Pero la sorpresa fue otra!. Cuando terminó de tomarse toda mi leche me dio un rico beso. Y con ese beso, toda mi leche empezó a entrar en mi boca. El hdp no se la había tragado, y la estaba compartiendo conmigo!
Ya no sabía qué pensar, y por suerte, todas las cosas que pasaban no le daban lugar a mi cerebro para que pensara, sólo podía disfrutar.

Nos quedamos los 2 acostados un rato, hasta que agarré el control remoto y puse la tele.

A las 11.30 sonó el teléfono; nos avisaban que nos quedaba media hora. Nos cambiamos, dejamos la llave, nos subimos al auto y lo llevé para su casa.

Bueno, esté sería el "final" de la saga. Es el final de "Noches de borrachera", porque el resto de los encuentros fue sin alcohol de por medio jajajaja. Con Andy quedamos como muy buenos amigos, cada uno sigue con sus cosas, con sus minas, pero cada tanto, nos llamamos y nos damos un buen rato de placer, ratos que, con tiempo, y si Uds. quieren, seguiré relatando.

Como siempre, espero sus comentarios.