Creo que mi Hijo es Puto (Episodio 7)

Marian se emocionó entero y caminando como una gata lentamente, se inclinó enfrente de mi chota mirando a Gus y se introdujo lentamente la cabeza de mi chota, ensalivándola muy despacio y saboreándola como si fuera una frutilla enorme, con una cara de puta salvaje succionaba mientras gemía siempre sin perder la vista de Gus.

Era un trolo hecho y derecho y ya había chupado muchas pijas, se notaba en como controlaba la lengua que subía y bajaba hasta los huevos, dejando caer un hilo de baba que me volvía loco...

-Bien Marian, lo estás haciendo bastante bien... - le dije mientras le hundí la pija de golpe hasta la garganta, a lo que la putita respondió volviéndose loca y casi al punto del vómito empezó a mirarme con los ojos emocionados y a llegar a golpearme con su boca carnosa las pelotas que a esta altura las tenía a punto de reventar.

Gus se empezó a poner un poco celoso y serio: - Bebote- le dije- no te preocupes que ya me lo agradecerás- y vos putito, tenés que aprender a degustar la verga de un macho- le susurré al oído y le escupí la cara mientras le seguía cogiendo la boca.

Marian parecía un experto y no soltaba la pija por nada del mundo, mirándome a los ojos y en cuatro patas con el culo moreno bien abierto y su chota virgen a punto de reventar.

-Bueno, bueno..., vamos a hacer otra cosita bebotes..., vení Gus, arrodilláte vos también y comele la colita a tu novia, dale.. pero cuidándo de chuparle y embadurnarle bien con baba los huevos, dale amor....

Gus se volvió loco y empezó a culear ese orto divino a destajo con su lengua húmeda y haciéndome caso en todo lo que le decía.

La trola de Marian abría las piernas a más no poder mientras babeaba como una perra en celo...- Bien bebé, sos una verdadera bebota puta...- le dije mientras le acariciaba las orejas.

-Bueno, basta, basta, a ver nenes! todos de pie... ahora mismo...!- sorprendidos se incorporaron a regañadientes con las chotas exultantes y venosas- ahora un poco de romanticismo... a ver - ordené mientras me puse de pie y quedamos los tres con las pijas cerca, de frente...- ahora a comernos la boca, no todo va a ser chupar pija no? -dije sonriendo- .

Empezamos un juego de lenguas a tres bandas exquisito, lleno de baba, jugando despacio, babeándonos toda la cara, con los ojos cerrados, procurando que la punta de nuestras vergas se rozaran suavemente, era hermosa esa sensación y empecé a acariciarle las colas duras a mis dos nenas, mientras me babeaban los labios, el mentón, los ojos....

-Chicos, van a recordar siempre a su Papu del alma....

(Continuará)