Ese deseo para el sexo no tiene tiempo ni lugar. Mucho menos en las diferentes etapas de la vida. No importa, desde la pubertad hasta la vejez, el sexo va a ser fundamental en la mayoría de las relaciones. El tiempo pasa, el cuerpo cambia y su rendimiento en la cama se transforma. Para algunos, el buen sexo es en los 20 y pico, para otros se perfecciona con la edad y el sexo mejora con el tiempo como un buen vino.
No podemos asegurar ni lo uno ni lo otro, simplemente sé por expriencia y por la de mucho samigos, que los desacuerdos aparecen en la cama cuando realmente no conoces con quién te estás acostando por única vez, o con alguien que estás construyendo una relación.
Es esencial darse un tiempo para conocer a nuestro compañero/a de cama, interrogar sobre sus posiciones favoritas, puntos de placer, puntos incómodos, puntos de dolor, para así usarlos a tu favor y aumentar las fantasías erógenas primarias.
El orgasmo no tiene buena edad determinada, depende más de la emoción junto con la fantasía, el deseo y la pasión por tu pareja, puede ser una descarga de sensaciones físicas que te estremezcan si no las reprimes, hasta un torrente de emociones mentales que te hagan temblar de pasión al compartirlo con alguien que amas totalmente.
Pero si se trata de hablar del orgasmo por década de vida, quizás así podría describirse mejor.
A los 20 – Las hormonas van de subida, la forma del cuerpo y las erecciones constantes hacen que en esta etapa quieras sexo todo el tiempo. Ideal para probar tus límites, en una noche seguro podrás tener varios orgasmos. Lo ideal es llevar el entusiasmo y controlar la eyaculación. Pensando más en el resultado final, el placer es a menudo pasado por alto. Consejo: Explora el cuerpo de la pareja y cambia de posición a menudo para evitar la eyaculación precoz. El objetivo es el placer, el goce es sólo un resultado.
A los 30 – Este es el momento de que la naturaleza comienza a desacelerarse. La erección en el momento equivocado ya no es un problema constante. Además de los estímulos visuales, su cuerpo necesita el tacto. Con menos líbido urgente, el buen faje te va indicando el memor momento de proceder a la penetración. La emoción acumulada puede provocar orgasmos increíbles. Consejo: Utiliza tu experiencia para lograr esas posiciones y maniobras que sabes que te hacen disfrutar. Utiliza mucho lubricante, ya que el sexo puede y debe ser largo y sin dolor.
A los 40 – Con la testosterona más baja, la erección puede ser menos rígida. Esto no significa que la excitación sea menor. En esta fase, todas las posiciones pueden haber sido ya probadas. Es hora de trabajar los puntos erógenos más emocionantes, los juguetes y hacer uso de disfraces. Consejo: No entrar en la rutina. Piensa y prepara diversos trucos para sorprender a tu pareja.
A los 50 – La urgencia de eyacular disminuye. El cuerpo tiene otro ritmo. El objetivo no está puesto en el resultado final. Se enfoca en trazos visuales y físicos. La postura de tu cuerpo en la cama afectan a la erección. Evite las relaciones sexuales hastiadas. Consejo: Estando erguido, de pie, ayuda a mantener una erección más rígida. El sexo no es la masturbación de dos personas, se centran en su deseo de colaborar totalmente en el coito
No podemos asegurar ni lo uno ni lo otro, simplemente sé por expriencia y por la de mucho samigos, que los desacuerdos aparecen en la cama cuando realmente no conoces con quién te estás acostando por única vez, o con alguien que estás construyendo una relación.
Es esencial darse un tiempo para conocer a nuestro compañero/a de cama, interrogar sobre sus posiciones favoritas, puntos de placer, puntos incómodos, puntos de dolor, para así usarlos a tu favor y aumentar las fantasías erógenas primarias.
El orgasmo no tiene buena edad determinada, depende más de la emoción junto con la fantasía, el deseo y la pasión por tu pareja, puede ser una descarga de sensaciones físicas que te estremezcan si no las reprimes, hasta un torrente de emociones mentales que te hagan temblar de pasión al compartirlo con alguien que amas totalmente.
Pero si se trata de hablar del orgasmo por década de vida, quizás así podría describirse mejor.
A los 20 – Las hormonas van de subida, la forma del cuerpo y las erecciones constantes hacen que en esta etapa quieras sexo todo el tiempo. Ideal para probar tus límites, en una noche seguro podrás tener varios orgasmos. Lo ideal es llevar el entusiasmo y controlar la eyaculación. Pensando más en el resultado final, el placer es a menudo pasado por alto. Consejo: Explora el cuerpo de la pareja y cambia de posición a menudo para evitar la eyaculación precoz. El objetivo es el placer, el goce es sólo un resultado.
A los 30 – Este es el momento de que la naturaleza comienza a desacelerarse. La erección en el momento equivocado ya no es un problema constante. Además de los estímulos visuales, su cuerpo necesita el tacto. Con menos líbido urgente, el buen faje te va indicando el memor momento de proceder a la penetración. La emoción acumulada puede provocar orgasmos increíbles. Consejo: Utiliza tu experiencia para lograr esas posiciones y maniobras que sabes que te hacen disfrutar. Utiliza mucho lubricante, ya que el sexo puede y debe ser largo y sin dolor.
A los 40 – Con la testosterona más baja, la erección puede ser menos rígida. Esto no significa que la excitación sea menor. En esta fase, todas las posiciones pueden haber sido ya probadas. Es hora de trabajar los puntos erógenos más emocionantes, los juguetes y hacer uso de disfraces. Consejo: No entrar en la rutina. Piensa y prepara diversos trucos para sorprender a tu pareja.
A los 50 – La urgencia de eyacular disminuye. El cuerpo tiene otro ritmo. El objetivo no está puesto en el resultado final. Se enfoca en trazos visuales y físicos. La postura de tu cuerpo en la cama afectan a la erección. Evite las relaciones sexuales hastiadas. Consejo: Estando erguido, de pie, ayuda a mantener una erección más rígida. El sexo no es la masturbación de dos personas, se centran en su deseo de colaborar totalmente en el coito
3 comentarios - Cómo disfrutar del mejor sexo a los 20,30,40 y 50.. (info)
gran verdad: