:love: ❤️ ❤️ Siesta calurosa muy caliente ❤️ ❤️ :love:
Hacía un calor de perros, tenía el cuerpo sudado, estaba en bolas, arrodillado y chupando los huevos de Fabián que estaba tirado en un sofá con la piernas abiertas dejando a mi voluntad todo el contenido y aroma de su entrepierna, estaba sudada y despedía ese olorcillo que me enloquece y que sabe a macho en celo, lamía, le llenaba los huevos, el ojete y su enorme pija de saliva y me las engullía, disfrutaba plenamente en tanto nuestros cuerpos estaban completamente mojados, estábamos haciendo lo nuestro en el octavo pido donde este macho de película vive, estábamos en el living que tenía una puerta vidriada que daba a un balcón, al frente calle de por medio otros edificios también con vista a la calle, siempre me atrajo el cruising pero no lo practicaba por pudor, en fin lo cierto es que no le tomé el gusto hasta que conocí a Fabián que era un practicante asiduo de sexo en lugares públicos, varias veces me lo había propuesto, rechaza la idea hasta que un día en el cine, con sus mordiscos de oreja y las grosería de me dejó tan caliente que mandé al carajo todo el pudor que impedía la fantasía de mi ocasional macho, lo hicimos en las butacas y fuimos pillados por el acomodador a quien por silencio debí darle un mamada de película, cosa que por cierto no me disgustó, otra vez lo hicimos en el taxi y el conductor destrozó mi culo con una pija descomunal en tanto Fabián le alentaba a que me partiera en dos.
Con Fabián lo hacíamos a pelo, me llenaba de leche el culo y me obligaba a que así anduviera, con el culo chorreante hasta el siguiente polvo, precisamente eso había sucedido aquel día, al legar a su dpto. me esperaba con la pija al palo, se estaba batiendo una paja lenta en el balcón, fui hacia él, como saludo de dio la vuelta, me recosté contra la baranda del balcón de 8vo, me bajó el breve short ajustado que levaba puesto, me empezó a pajear, escupió copiosamente en mi culo y me la introdujo sin piedad ni permiso, el grito que pegué debió escucharse hasta la planta baja, me dio como 20 serruchadas y se vino como animal, profiriendo al mismo tiempo todo tipo de grosería que me calentaron aún más, me deshice de la poca ropa que aún llevaba puesta, se postró en el sofá y me dijo: vení putito, límpiamela con la lengua y chupámela hasta hacerla para de nuevo, del mi culo escurrían copiosos hilos de leche tibia que si no caían al piso bañaban mis entrepiernas, de tanto en tanto me las refregaba entre ellas y eso me ponía casi al punto de la demencia, de pronto en medio de paso me dice que mire hacia la ventana, en el edificio del frente un gordo de 40 y pico nos miraba y se pajeaba, me dijo: mostrale el culo y decile que se cruce y te lo rompa, quiero como te lo hace y como aullás del placer, sin pensarlo, le mostre el culo, recogí con mis manos buena cantidad de semen gire, lo miré fijamente y lo llevé a mi cara y boca para embárrame frente suyo con ese líquido cuyo aroma y gusto ácido tanto me enloquecen, le hice señas con el dedo y me volví a lo mío, Fabián estaba armado de nuevo, me dijo: calle, chupe y trague, los hice, me daba arcadas pero la sensación de la presión que ejercía contra mi campanilla no hacía más que incrementar mi calentura, en medio de todo, suena el timbre, observo por la mirilla y le veo al gordo esperando impaciente tras la puerta, abro, lo invito a pasar palpándole el bulto, giro sobre él, le doy un empujón con mi cola chorreante.
Le digo, cerrá la puerta, embolate y vení mostrame lo que tenés, no se como lo hizo pero instantáneamente estaba sentado al lado de mi macho en bolas y con una pija de tamaño normal pero muy grosa en la mano, sin preámbulo me la introduzco en la boca y percibo también el aroma de entrepiernas de macho y un dejo de pis cerca del prepucio, Fabi se coloca detrás me introduce 4 dedos en el culo y me empieza a coger con ellos, le doy mordiscos al gordo quien al percibirlo casi muere de placer, los mordisqueo, los araño en tanto le introduzco el dedo medio en su culo sudado, al principio se resiste y lo cierra pero al empezar a masajearle la próstata, se relaja y se deja hacer como mejor se me antoje, en ese momento ya siento las embestidas de Fabían que me empieza a coger brutalmente, me la pone al fondo, la quita por completo y me la vuelve a introducir sin piedad, los chasquidos producidos por los restos de semen que antes había depositado en mi culo y que regaron mis nalgas invadían el ambiente, todo en el pequeño living olía a semen, aroma de macho y sudor, el gordo se tomaba de los pelos, cuando le pellizcaba las tetillas y se la chupaba con fuerza, de tanto en tanto le estiraba de los pelos que cubrían por completo su cuerpo, parecía un gorila, los osos no son lo mío prefiero que mis machos sean lampiños pero cuando estoy al mango devoro con placer cualquier cosa que se presente, a esas alturas el gordo era simplemente una pija lista para devorarla, el resto no me importaba.
De pronto resultó que el gordo no era mudo, hablaba y me dijo: te quiero coger también, dando muestras de excelente anfitrión, Fabián quitó su pija chorreante de mi culo, se acerca a mi oído, me da un beso de lengua profundo y luego me dice: escuchaste lo que te pide el señor? Dale no seas malo y dale el gusto… hay que ser buen vecino, lo beso me incorporo, el gordo medio hipnotizado por el espectáculo, se acomoda en el sofá, mirándolo fijamente a los ojos hago lo mio, me acomodo y me la introduzco sin problemas, lo empiezo a cabalgar en tanto le muerdo las tetillas y le prodigo pequeños chupones en el cuello, me toma de la cara y me da un beso torpe, se notaba que no era lo suyo, tomo la iniciativa y me sigue, Fabi desde atrás me nalgueaba con su pija y estiraba los huevos del gordo, también le da uno o dos mordiscos a los huevos, le introduce también 2 dedos en el culo, el gordo da muestras de placer antes nunca experimentado, de pronto se incorpora Fabi, me besa y me dice: a ver como te comes las 2 juntas, creí que quería que se la chupe pero no, estaba a punto de alojar su tremenda pija junto con la del gordo en mi culo, traté de relajarme pero me fue imposible al principio, sentí que volvía a ser desvirgado pero aguanté la embestida que fue lenta, tierna, matizada con besos y caricias pero muy dolorosa, al sentir sus huevos y los del gordo contra mi nalga, nos quedamos quietos por un rato hasta que de pronto el dolor empezó a ceder y la calentura volvió a inundar mi cuerpo, los motivé a que me cogieran, lo hicieron torpemente al principio pero al cabo de unos minutos los tres nos movíamos como auténtica relojería suiza, resultó tan gratificante la sensación de ser penetrado por dos machos y la tener el culo completamente abierto, estoy convencido que una vez cedido el dolor me cabría cualquier cosa en el culo, es más deseaba volver a sentir la presión dolorosa del principio, empecé gemir y ellos se contagiaron empezaron un mete-saca de película que hizo que acabara sin siquiera tocarme, me vine como medio litro en la panza peluda del gordo, me refregué contra él y nos empavonamos mutuamente con mi leche, en medio de los refriegos siento los trallazos de no sé cual pija pero ambas volvieron a depositar grandes cantidades en mi culo, me sentí satisfecho y de relamí al incorporarme y sentir como se me corría tanta leche del interior de mi cola, quedé completamente bañado en pura leche, no daba más me tiré en el sofá y quedé dormido no sé hasta cuando, al despertarme tenía el cuerpo lleno de semen endurecido, fui al baño Fabi se estaba dando un baño, había tomado también su siesta, nos metimos en la regadera, nos limpiamos mutuamente, me dio una chupada de culo espectacular que hizo que me calentara de nuevo y permitió que empezáramos de nuevo.
Es por eso que me encantan las siestas de verano.
:love: ❤️ ❤️ ❤️ ❤️ ❤️ ❤️ ❤️ ❤️ ❤️ ❤️ :love:
3 comentarios - Crónicas de ciudad X